La última semana de enero hicimos un gesto particular para visibilizar nuestro compromiso de ser instrumentos de Paz. Nuestro caminar hacia una relación cada vez más fraternal con todos los que nos rodean es continuo, los 365 días del año, pero en esta semana lo resaltamos y constatamos con algunas dinámicas: la primera, mediante un mensaje personalizado hacia algún compañero que pudiera servir de ánimo, de afecto, de reconciliación o de esperanza, que a todos tanta falta nos hace en estos momentos tan inciertos; en otra dinámica, cada clase ha plasmado sus reflexiones en un árbol para que, entre todos, podamos construir un gran bosque utópico que nos oxigene y limpie el ambiente de tantos factores negativos y contamientanes que seguimos sufriendo hoy en día en nuestro ambiente.

Terminamos la jornada con un manifiesto y una oración. Sin duda un día bonito y especial para ratificar nuestro compromiso por un mundo mejor.